Del cuento a la serie: Rumpelstiltskin

Es hora de que conozcamos el cuento del que proviene Rumpelstiltskin, el villano en el que se inspira el equivalente de Gold en el mundo de los cuentos.

Aunque en Once Upon a Time Rumpelstiltskin, (Mr. Gold en Storybrooke), es presentado de forma recurrente como villano en algunas de las versiones de los cuentos populares, el cuento original dista mucho de ésto. Es en el episodio 2x16 donde por fin conocemos la historia a la que está ligada Rumpel. La versión joven de Cora (interpretada por Rose McGowan) es la encargada de dar vida a la hija del molinero.

Rumpelstilskin en sí no tiene cuento propio, es el personaje antagonista principal de un cuento de hadas (llamado Rumpelstilzchen en el alemán original).
Es la adaptación de los Hermanos Grimm la que más se conoce y la que te contamos a continuación:

"Había una vez un molinero pobre que tenía una hija muy hermosa. Un día, tenía que ir a hablar con el rey, y para parecer más importante le dijo que tenía una hija que podía hilar la paja y convertirla en oro. El rey, curioso, le retó a llevarla a palacio para comprobar si era verdad. Cuando trajeron a la muchacha, el rey la encerró en una habitación llena de paja, le dio una rueca y una bobina y le dijo que si no convertía la paja en oro en una noche, moriría.

La hija del molinero se sentó sin poder hacer nada por salvar su vida. No tenía ni idea de cómo hilar la paja y convertirla en oro, de modo que comenzó a llorar. De repente, la puerta se abrió y entró un hombrecillo.

Éste le preguntó que por qué lloraba por lo que la chica le contó lo sucecido. El hombrecillo entonces le dijo que qué estaría dispuesta a darle si él lo hacía por ella. La joven, sorprendida, le dio su collar y el hombrecillo convirtió la paja en oro.

Al amanecer, el rey ya estaba allí, y cuando vio el oro quedó atónito y encantado, pero su corazón se volvió más avaricioso. Llevó a la hija del molinero a otra habitación mucho más grande y llena de paja, y le ordenó que la hilara en una noche si apreciaba su vida.

La chica no sabía qué hacer, y estaba llorando cuando la puerta se abrió de nuevo. El hombrecillo apareció y le propuso otro trato: hilar la paja a cambio de su anillo. La muchacha aceptó.

El hombrecillo cogió el anillo, y empezó otra vez a hacer girar la rueca. Por la mañana, había hilado toda la paja y la había convertido en brillante oro. El rey se regocijó más allá de toda medida cuando lo vio. Pero como no tenía suficiente oro, llevó a la hija del molinero a otra sala llena de paja aún más grande que la anterior, y pensando que casándose con ella conseguiría ser más rico aún, dijo que si en el transcurso de esa noche lo conseguía, se convertiría en su esposa. 

Cuando la chica se quedó sola, el hombrecillo apareció por tercera vez, y dijo:

- ¿Qué me darás si hilo la paja esta vez? 

- No me queda nada que darte. - respondió la muchacha.

- Entonces prométeme, que si te conviertes en reina, me darás tu primer hijo. -

-Quién sabe si eso ocurrirá alguna vez. Pensó la hija del molinero. Y no sabiendo cómo salir de aquella situación le prometió al hombrecillo lo que quería. Y una vez más hiló la paja y la convirtió en oro.

Cuando el rey llegó por la mañana y se encontró con todo el oro que habría deseado, se casó con ella y la preciosa hija del molinero se convirtió en reina.

Un año después, trajo un precioso niño al mundo y en ningún momento se acordó del hombrecillo hasta que un día, éste se presentó en su habitación y le exigió que le diera lo que le prometió. 

La reina estaba horrorizada y le ofreció todas las riquezas del reino si le dejaba a su hijo. Pero el hombrecillo lo rechazó pues consideraba que algo vivo valía más que todos los tesoros del mundo.

La reina empezó a lamentarse y a llorar, tanto que el hombrecillo se compadeció de ella y le propuso un nuevo trato: Si en tres días conseguía descubrir su nombre, conservaría a su hijo.

Entonces, la reina pasó toda la noche pensando en todos los nombres que había oído, y mandó un mensajero a lo ancho y largo del país para preguntar por todos los nombres que hubiera. Cuando el hombrecillo llegó al día siguiente, empezó con Gaspar, Melchor, Baltasar... Dijo, uno tras otro, todos los nombres que sabía, pero no acertaba.

En el segundo día había preguntado a los vecinos sus nombres, y ella repitió los más curiosos y poco comunes, pero de nuevo no acertaba.

Al tercer día, mientras la reina subía una gran montaña al final de un bosque vio a un hombrecillo bastante ridículo que estaba saltando. Dio un brinco sobre una pierna y gritó:

"Hoy hago el pan, mañana haré cerveza,

al otro tendré al hijo de la joven reina.

Ja, estoy contento de que nadie sepa

que Rumpelstiltskin me llamo."

La reina se puso muy contenta cuando escuchó el nombre. Y cuando al poco rato llegó el hombrecillo, ésta le preguntó: 

- ¿Te llamas Conrad? 

- No. 

- ¿Te llamas Harry? 

- No. 

- ¿Quizá tu nombre es Rumpelstiltskin? 

- ¡Te lo ha dicho el demonio! ¡Te lo ha dicho el demonio!, gritó el hombrecillo. 

Rumpelstiltskin se enfadó tanto que hundió el pie derecho en la tierra tan fuerte que acabó hundiento toda la pierna. Y cuando tiró con rabia de ésta con las dos manos, se partió en dos". 

Tanto en cine como en televisión Rumpelstiltskin, también se ha versionado:

-En la pelicula Shrek Forever After de los estudios Dreamworks, Rumpelstiltskin es el antagonista. Aquí aparece como un hombrecillo que puede conceder felicidad a cualquier persona mediante la firma de un contrato.

-En el libro El Psicoanalista, de John Katzenbach, el antagonista se hace llamar "Rumpelstiltskin". 

-Por su parte, Rumpelstitskin aparece en la película Happily N'Ever After de 2007, realizada por la productora Berlin Animation Film.

Te dejamos este entretenido vídeo donde se cuenta la historia de Rumpelstitskin con dibujos animados: