Review del 2x13: Tiny

Una vez más os traemos la review del nuevo episodio, seguro que Tiny no ha pasado desapercibido por la cantidad de curiosos detalles y anécdotas referentes a otros mundos que nos ha dejado, repasa sus mejores momentos con nosotros para que no se te olvide nada importante.

Hacia el nuevo mundo:

Comenzamos este capítulo poco después de que finalizase el anterior, con Mr. Gold llamando a la puerta de los Charming para partir en busca de Bae junto a Emma, pero para desesperación del caballero, todo parece indicar que al final no viajarán solos, ya que Emma se niega a dejar a Henry en el pueblo conociendo la presencia de Cora. Ya en el aeropuerto Rumpel se encuentra el primer obstáculo, debe desprenderse de la capa de Bae que lleva en el cuello para que pueda pasar por la cinta de seguridad, al principio se niega, llegando incluso a discutir con los guardias de seguridad por temor a perder la memoria, pero finalmente accede a la petición cuando Emma le tranquiliza prometiéndole que no dejará que vuelva a perder la memoria, a muchos nos hubiera encantado ver qué hubiera podido hacer ella al respecto de llegar a ocurrir el terrible suceso. Momentos más tarde Gold parece desquiciado, incapaz de mostrar esa fría máscara de tranquilidad a la que nos tiene acostumbrados, por lo que acude al baño para desahogarse a puñetazos contra el portapapeles que además es de metal, la sorpresa viene a continuación cuando su magia no le funciona al intentar curar su maltrecha mano.

De vuelta a las andadas:

En este episodio también descubrimos que Regina parece haberse rendido a la ilusión de recuperar a su madre, habiéndose creído todas y cada una de las palabras de Cora. Por suerte poco a poco va descubriendo el pastel, y es que de momento ya sabe que Archie no estaba en realidad muerto, sino que todo ha sido una artimaña de su madre para inculparla. A pesar de todo parece seguir con su plan de recuperar a Henry ayudada por la abuela, y es quien le ofrece la seta de crecimiento al gigante Anton para que pueda machacar literalmente a Charming con todas las de la ley. La escena de Regina más inquietante en este episodio es sin duda su reencuentro con Hook, donde no duda en recriminarle que no haya sido capaz de matar a Cora cuando se lo encargó, y en el que nos da la explicación a la repentina desaparición de su madre que necesitábamos, la Reina de Corazones no ha visto prudente salir de su escondrijo con los ánimos tan revueltos, por lo que un gigante fugado con sed de venganza hacia el Príncipe es la distracción que necesitaban.

Un gigante incomprendido...

Nuestro conocido amigo el gigante Anton regresa nuevamente en este capítulo para descubrirnos su historia, y es que la vida no es fácil ni siquiera siendo un enorme o diminuto gigante. La cuestión es que Anton sentía una gran fascinación por la vida de los humanos, su cultura, costumbres y su forma de vida le llamaban poderosamente la atención, y un día, harto de las burlas de sus charlatanes hermanos, decide bajar él mismo por la judía para probar su teoría de que no son en realidad tan terribles como los pintan. Entonces conoce a James, el arrogante hermano de David, y a Jack, su valiente amante. Ambos son muy amables con él, y le convencen con el pretexto de que el reino está endeudado para que vuelva a su castillo por la judía. Allí matan a todos sus hermanos y saquean todo el oro que pueden llevar, pero comenten el error de confesarle que lo que realmente les interesa son las judías mágicas que cultivan, por lo que Arlo, el hermano más sabio de Anton, le encomienda la tarea de incendiar los campos de cultivo para que de esta forma no caigan en manos de los humanos. Finalmente cae incluso el mismo Arlo, ya que las espadas de James y Jack están impregnadas de un poderoso veneno. Momentos antes de morir, Arlo le entrega a Anton el último brote cultivable de una judía, y le dice que llegado el momento, sabrá que hacer con el. También se confirma que el esqueleto que vimos anteriormente en el castillo de los gigantes es el de Jack, porque James la deja allí moribunda para poder marcharse con el tesoro.

...que se vuelve iracundo

Cuando después de utilizar a Hook para descubrir la ubicación de su barco, Snow y Charming deciden liberar a Anton que se encuentra prisionero en el, rápidamente el gigante recuerda el rostro del hombre que destrozó su vida, y comienza a ver su secuestro a manos de Cora como la oportunidad perfecta para cumplir su venganza. Lo que obviamente no sabe, es que aunque el rostro sea idéntico, David poco tiene que ver con el traicionero James que se cruzó en su vida. Durante la persecución tiene lugar el momento cómico del capítulo, donde Leroy le pregunta a David cuál es su verdadero nombre, éste le dice que James era el de su hermano, Snow continúa contando que Charming es el mote que ella misma le puso, y finalmente David confirma que David es su verdadero nombre aunque también sea el de mentira, la conclusión que Leroy saca es clara "¡Te llamaré como me dé la gana!". Después de todo, Charming intenta negociar con Anton, que a pesar de aceptar el trato que incluye la vida de David por la de todos los aldeanos, acaba cayendo por una hondonada que él mismo ha creado al saltar con su tamaño original, y es precisamente entonces cuando termina el efecto de la seta agrandadora, el gigante está ahora a merced de los humanos... menos mal que estos son buena gente y deciden ayudarle para que no caiga al abismo. Al principio Anton se niega, pues piensa que en su caso morir dolería menos que seguir viviendo, pero después de todo decide aceptar la mano del que hasta ahora creía su enemigo. Todo parece apuntar que tendremos gigante para rato, porque los picos de los enanos no mienten, y ya le han dado un mote para que pueda cultivar junto a ellos la judía que necesitan para volver a su tierra.